En cuanto al tema de la normalización, hay que advertir que, a pesar
de la existencia de normas para la elaboración de resúmenes, surge cierta
dificultad a la hora de su aplicación. Esto ocurre porque todas las técnicas
del análisis documental de contenido, y especialmente el resumen, se
caracterizan por la capacidad intelectual y la abstracción que requieren.
Normalizar la elaboración de resúmenes es, por tanto, complicado. A pesar de
todo, las recomendaciones de tipo formal y estilístico de carácter general nos
ayudan a confeccionar resúmenes con líneas similares de presentación.
Las normas más importantes relativas al resumen son las
siguientes:
● NORMAS INTERNACIONALES
- ISO 214:1976. Esta
norma de la International Standartization Organization
se centra en el contenido, presentación
y estilo de los resúmenes. Recomienda elaborar resúmenes breves y claros que
sean capaces de transmitir las ideas fundamentales del autor del documento, su
metodología, resultados y conclusiones. Finaliza con ejemplos de resúmenes
elaborados según la norma.
- ANSI Z39.14:1979.
Promulgada por el Instituto Nacional
Americano de Normalización, está basada en la norma ISO descrita
anteriormente. Define el alcance, las definiciones, propósito y uso del
resumen, tratamiento del contenido del documento y tiene un epígrafe dedicado a
la presentación y estilo del resumen. Finaliza también con ejemplos.
● NORMAS NACIONALES
- UNE 50-103:1990. Es
la norma específica para la preparación de resúmenes, creada por la Asociación Española de Normalización (AENOR). Está también basada en la ISO 214:1976, aunque
los ejemplos de resúmenes que muestra proceden de publicaciones españolas.
Algunos rasgos de esta norma que hemos considerado interesante resaltar son los
siguientes:
·
El resumen debe exponer los objetivos
principales y el alcance del estudio o las razones por las que se ha
escrito el documento.
·
La mayoría de los documentos que describen un trabajo experimental
llevan un resumen que expone objetivos, metodología, resultados y conclusiones,
pero la secuencia óptima de elementos
dependerá de los usuarios a los que vaya dirigido.
·
Para monografías y actas,
un resumen puede ser suficiente, cuando tratan un tema homogéneo. En caso
contrario, se hacen resúmenes separados por cada capítulo o sección.
·
Patentes: cada
patente o solicitud de patente debe acompañarse de un resumen.
·
En una revista, el
resumen debe figurar al principio del documento, en un lugar visible.
·
Debe hacerse un resumen de cada artículo de revista, ensayo o
discusión.
·
En publicaciones
secundarias, se debe poner delante o detrás del resumen la referencia
bibliográfica del original.
·
El resumen debe estructurarse en un solo párrafo y debe redactarse con frases completas, utilizando
las palabras o expresiones conectoras
necesarias para la coherencia del texto, de cara a conseguir una redacción
clara, breve y precisa.
·
Utilizar la voz activa
y la 3ª persona preferiblemente
·
Comenzar el
resumen con una frase que represente la idea
básica del tema principal del documento.
·
Indicar el tipo de documento que es si no se deduce del título
(por ejemplo, estudio teórico, estudio de caso, etc.), así como su naturaleza
(ponencia, tesis, etc.).
·
Utilizar palabras
significativas tomadas del texto, que ayuden a la recuperación automatizada.
·
Evitar: términos
infrecuentes, acrónimos, siglas, abreviaturas o símbolos. En caso de que sea
necesario poner alguno, se definen la primera vez que aparezcan.
No incluir: tablas, ecuaciones,
fórmulas, diagramas si no son estrictamente