Para un blog personal
hay que publicar una vez a la semana. Los blogs empresariales deberían publicar
entre dos y tres veces a la semana. Publicar por debajo de estos mínimos
causará una mala sensación. Parecerá que no somos capaces de cumplir un calendario
de publicación, que no tenemos constancia en el trabajo y que hemos abandonado
el blog.
No debemos limitarnos a
cumplir los mínimos. Necesitamos publicar contenido de calidad y hacerlo con frecuencia.
Al publicar de forma regular atraemos a los motores de búsqueda.
Debemos ser constantes
a la hora de publicar. Un post debe tener entre 350 y 450 palabras. El lector
medio de un blog es muy parecido al de un periódico. Si queremos que nuestros
post resulten legibles, debemos escribir como si fuese un artículo que se
publicará en un periódico.
Debemos adoptar nuestro propio estilo, asegurándonos que utilizamos un tono cercano, comunicacional y centrado en los hechos. Si nuestros post son demasiado largos, es posible que el problema no sea la cantidad de palabras que tiene, sino el número tan elevado de ideas que hemos intentado recoger.
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